Se que muchos de ustedes saben lo difícil que es tomar decisiones, tener que decidir qué se puede hacer y qué no, tratar de que todos estén cómodos y conformes, algo que a diario es complicado. Sabemos perfectamente que cuando nuestras decisiones se celebran en algún sector, en otro no tanto, y aprendimos a convivir con ello mediante este ida y vuelta constante en el que nos comprometimos desde el minuto cero. Gobernamos, escuchando a la gente. Apostamos al diálogo, la interacción, a conocer qué piensan y tener eso en cuenta al momento de decidir.
Paulatinamente estamos empezando a acercarnos a la “normalidad”, todavía falta pero queda mucho menos. Avanzamos una gran parte se esta etapa y lo hicimos en forma solidaria y responsable, por eso seguimos sin casos positivos en nuestra ciudad.
Hay dos temas centrales: la salud y la economía. Y en la búsqueda de ese equilibrio es que vamos avanzando diariamente.
Sé que tienen la necesidad de volver a su ritmo habitual de vida, y lo entiendo perfectamente. Todos queremos hacerlo.
Me toca, en lo personal, extrañar a mi vieja, a mi viejo, a mis amigos. Me pongo en el lugar de cada uno, cada día, y seguramente muchos se pondrán en el mío, y sabran la responsabilidad que implica saber que de nuestras decisiones políticas, dependen, nada más y nada menos que, todos los vecinos.
Francamente les digo, que nada es fácil en este contexto, nuevo e incierto para todos, pero es lo que nos tocó atravesar y lo estamos afrontando de manera responsable desde el primer día.
Me siento orgulloso de todos, del equipo, del trabajo en conjunto y también de aquellos que no han estado de acuerdo y con respeto acercaron sugerencias que hemos tenido en cuenta.
De esta situación salimos todos juntos y deseo de corazón que despues de esta experiencia nos quede el aprendizaje, seamos más solidarios y empáticos, convencidos de que la acción de cada uno define al conjunto.
Gracias!
