El Consejo Federal de Educación evaluó el estado de situación del retorno a la presencialidad a nivel federal, ponderando el efectivo cumplimiento de los protocolos. El ministro nacional Nicolás Trotta sostuvo que “no podemos comenzar las restricciones cerrando las escuelas. “En Chubut, al día de hoy, no hay ninguna zona restringida por las autoridades sanitarias”, dijo la ministra Perata.
La ministra de Educación del Chubut, Florencia Perata, participó hoy de la asamblea 104 del Consejo Federal de Educación (CFE), que estuvo presidida por el titular de la cartera educativa nacional, Nicolás Trotta.
Durante el encuentro, que se extendió desde las 10 y hasta las 14, se presentaron, entre otros informes, los objetivos pedagógicos prioritarios para el 2021. También, una propuesta para administrar la presencialidad escolar en contextos de agudización de riesgo epidemiológico de acuerdo a los consensos establecidos por las 24 jurisdicciones frente a la segunda ola de COVID-19.
Los participantes coincidieron en que las restricciones deben estar vinculadas a los ámbitos sociales no protocolarizados que se desarrollan fuera de las instituciones educativas, y acordaron que ante la necesidad de restringir la presencialidad alternada a la que asiste hoy el sistema educativo, por el aumento de casos, deberá considerarse en la menor unidad geográfica posible.
“En nuestra provincia sostendremos la presencialidad cuidada, ya que hoy por hoy no hay ninguna zona restringida por el Ministerio de Salud, que es quien monitorea la situación epidemiológica. Los protocolos se están aplicando de manera efectiva en las escuelas, las burbujas se están cumpliendo conforme a la reglamentación conjunta entre Salud y Educación”, dijo la ministra Perata sobre la situación en Chubut.
En el encuentro federal se abordó el estado de situación del proceso de retorno a clases presenciales donde se ratificó la priorización de la escuela como ámbito de bajo contagio con el correcto cumplimiento de protocolos.
En ese sentido, Trotta afirmó: “No podemos comenzar las restricciones cerrando las escuelas. Si tiene que haber una disminución de la presencialidad para restringir la circulación de personas, no debería implicar la suspensión absoluta de las clases en las aulas como primer medida; se pueden administrar distintas medidas en torno a la asistencia en aquellas zonas que presenten mayor complejidad, considerando la menor unidad geográfica posible ya que la escuela ha dado muestras de ser un espacio seguro”.
Además, explicó: “Hemos avanzado en el funcionamiento de la plataforma Cuidar Escuelas, para contar con la información de manera constante y actualizada, sumando esa información a los análisis epidemiológicos que realiza el Ministerio de Salud de cada jurisdicción educativa y sanitaria de nuestro país”.
Y agregó: “Lo que permite que la escuela siga siendo un lugar de bajo riesgo son los protocolos estrictos que hemos aprobado federalmente. Confiamos en la fiscalización de cada una de las jurisdicciones, como confiamos también en los equipos directivos de cada escuela para desplegar los protocolos en cada establecimiento”.