La reciente propuesta de crear un ente de obras para financiar la infraestructura mediante un impuesto del 5% sobre el valor de las construcciones e inversiones en Puerto Madryn ha suscitado un intenso debate. Walter Kovac, presidente de la Cámara Inmobiliaria, expresa su preocupación por las posibles consecuencias negativas de esta medida.
En una entrevista, Kovac destacó los problemas de infraestructura que enfrenta la ciudad, especialmente en servicios de agua y energía, y reconoció la necesidad urgente de inversiones en estos sectores. Sin embargo, señaló que la imposición de un nuevo impuesto podría tener efectos contraproducentes.
“Actualmente, los desarrolladores ya asumimos costos significativos para conectar los servicios en nuestros proyectos. Añadir un 5% adicional encarecería aún más las propiedades, haciendo insostenibles muchos emprendimientos y disuadiendo a nuevos inversores”, afirmó Kovac. “En un contexto económico donde se busca reducir impuestos para incentivar la inversión, esta medida parece contradictoria y podría resultar en una disminución de la actividad constructiva, afectando la recaudación a largo plazo”.
Kovac también planteó dudas sobre la transparencia y eficiencia en la administración de estos fondos. La estructura propuesta, que incluiría representantes del estado municipal, concejales y miembros de diversas cámaras, no garantiza un proceso claro para la recaudación, gestión y priorización de las obras necesarias.
Además, expresó su preocupación por la desigualdad en la distribución de recursos. “Los desarrolladores que operan en zonas con servicios completos estarían subsidiando futuros desarrollos en áreas menos desarrolladas, lo que podría parecer injusto ya que no todos los sectores se benefician equitativamente de las inversiones”, explicó.
Desde la Cámara Inmobiliaria, se propone explorar alternativas más equitativas y transparentes. Kovac sugirió que los desarrolladores contribuyan directamente a los costos de los servicios necesarios para sus propios proyectos, como en el sistema de pavimentación con adoquines, donde los frentistas y el municipio colaboran en los costos y la ejecución de las obras.
“Es crucial acompañar al estado en la mejora de la infraestructura, pero de una manera más equitativa y transparente. Creemos que la propuesta actual de un impuesto del 5% requiere una revisión profunda”, concluyó Kovac. “Es fundamental encontrar soluciones que impulsen el desarrollo sin sofocar la inversión, promoviendo un crecimiento sostenible y equilibrado para nuestra ciudad”.