La Escuela 785 de Puerto Madryn inicio la refacción de su comedor, un espacio vital para la alimentación de sus estudiantes, gracias a una donación realizada por Ignacio Torres de su sueldo y al apoyo económico de la comunidad. Este sector, que se encontraba en condiciones deficientes para ofrecer desayunos y meriendas, está actualmente en proceso de acondicionamiento.
Serena Méndez, vicedirectora de la institución, destacó la importancia de esta iniciativa. “Es un sector muy antiguo de la escuela y no estaba en condiciones. Gracias a la donación, hemos podido avanzar considerablemente”, comentó. Además, mencionó la colaboración de Mármoles Mediterráneos, que aportó muebles para mejorar el espacio.
La profesora Rosanna Zelaschi, quien enseña construcción ciudadana, mencionó que esta semana ha sido especialmente significativa para la escuela, ya que se llevó a cabo un ciclo de charlas en el marco de la Semana de las Ciencias Sociales, donde participaron investigadores y docentes de la Universidad San Juan Bosco. “Buscamos acercar las ciencias a los chicos y despertar nuevas vocaciones”, explicó Zelaschi.
La escuela tiene programada una muestra anual el 15 de noviembre, donde los estudiantes presentarán los trabajos realizados durante el año. “Invitamos a toda la comunidad a participar. Es un evento abierto y los protagonistas son los chicos”, agregó Méndez.
Respecto a futuras mejoras, la vicedirectora afirmó que, si se obtienen más fondos, se proyectan nuevas reformas. La escuela está en proceso de formación de una asociación cooperadora para facilitar gestiones y fomentar la participación de las familias y la comunidad educativa en general.
El programa Nutriendo Chubut, que ofrece desayunos y meriendas, también se beneficia de estas mejoras, asegurando una alimentación adecuada para los estudiantes de la escuela, una de las pocas en Puerto Madryn que implementa este servicio.
