La reciente disolución de la Secretaría de Desarrollo Territorial, Hábitat y Vivienda del Gobierno Nacional, anunciada a través del Decreto 70/2025, ha generado una gran incertidumbre en Puerto Madryn, especialmente en lo que respecta a las obras proyectadas para diversos barrios de la ciudad. Esta decisión, que forma parte de la reestructuración del Estado, deja en el aire la continuidad de proyectos clave para la comunidad madrynense.
Desde la llegada de Javier Milei a la presidencia, la Secretaría de Vivienda, que dependía del Ministerio de Economía, había quedado prácticamente en un limbo, sin recursos ni un rumbo claro. La desaparición de esta secretaría no hace más que acentuar la preocupación de los municipios que, como Puerto Madryn, dependían de su financiamiento para llevar adelante importantes obras de infraestructura.
Para Puerto Madryn, esta medida implica un frenazo en proyectos que son esenciales para mejorar la calidad de vida de los vecinos, como el desarrollo de obras barriales, la construcción de una planta de tratamiento y la expansión del sistema de cloacas.
El cierre de la no solo refleja una mala noticia a nivel federal, sino que también pone en riesgo la posibilidad de resolver las carencias más urgentes de la ciudad de Puerto Madryn. Mientras que la gestión provincial se mantiene como un aliado en la búsqueda de soluciones, el aislamiento del municipio respecto a la Nación deja a la ciudad en una difícil situación, sin un horizonte claro para la ejecución de las obras tan necesarias para su desarrollo y bienestar.