Pedro “Tití” Varjao de Araujo recibió una pena de cuatro años de prisión por su participación en un audaz robo a la concesionaria Surisan. Será expulsado del país tras cumplir la condena.
El Ministerio Público Fiscal de Chubut logró una condena de cuatro años de prisión efectiva contra Pedro “Tití” Varjao de Araujo, ciudadano brasileño de 23 años, acusado de ser coautor de un robo agravado por haber sido cometido en poblado y en banda, con escalamiento y efracción. El hecho tuvo lugar el 9 de febrero de 2024 en la ciudad de Puerto Madryn.
Durante la madrugada de aquel día, Varjao de Araujo, junto a otros tres ciudadanos brasileños —William Cardoso Nascimento, Danielly Rebeca Da Silva Novaes y Roberto Mafra Silveira— ingresó de manera ilegal a la concesionaria Surisan, representante oficial de Nissan, trepando al techo del edificio y rompiendo el cielorraso para acceder a las llaves de los vehículos. Luego, sustrajeron dos camionetas 0 km y huyeron por la Ruta Nacional N.º 3, con el apoyo logístico de otro grupo en un vehículo guía.
Gracias a una exhaustiva investigación por parte de la Fiscalía —que incluyó análisis de cámaras de seguridad y tareas de inteligencia—, los sospechosos fueron identificados, detenidos y se logró recuperar los vehículos.
Juicio abreviado y expulsión del país
El 31 de marzo, Varjao de Araujo reconoció su responsabilidad penal y accedió a un juicio abreviado, propuesta aceptada por el fiscal jefe Alex Williams y el funcionario Juan Pablo Santos, y homologada por la jueza penal Patricia Asaro. La sentencia no solo impone la pena de prisión efectiva, sino también la notificación a la Dirección Nacional de Migraciones para tramitar su expulsión del país una vez cumplida la condena y abonadas las costas judiciales.
Declaraciones del director de la concesionaria
José Oroquieta, director de Surisan, valoró el accionar de la justicia y expresó satisfacción por el resultado del proceso:
“No queríamos quedarnos en el rol de víctimas. Nos comprometimos a que este delito no quedara impune. Contratamos abogados, nos constituimos como querellantes y acompañamos todo el proceso”, afirmó.
Oroquieta destacó que la condena tiene también un efecto disuasivo:
“Este es solo el primero de los cuatro imputados. Para un joven de 23 años, pasar varios años preso, lejos de su país, tiene que dejar una enseñanza. El mensaje es claro: no se la pueden llevar de arriba”.
Situación de los otros implicados
Actualmente, uno de los coimputados se encuentra en la Unidad 6 por ser considerado de alta peligrosidad. Otro está a la espera de un juicio abreviado, mientras que un cuarto logró fugarse de una cárcel provincial, hecho que generó fuertes críticas al Servicio Penitenciario.
“Nos costó mucho, tiempo, dinero y esfuerzo, pero no nos íbamos a quedar de brazos cruzados. Las camionetas fueron recuperadas, pero con daños, ya no eran 0 km. Fue una pérdida económica importante, pero logramos justicia”, concluyó Oroquieta.