Daniel Currumil, exconcejal, dice que la intendenta Loyola quiere obligar a la entidad a cobrar algo que no le corresponde.
El expresidente del Concejo Deliberante de Camarones, Daniel Currumil, sañió este miércoles a cuestionar la decisión de la intendenta local, Claudia Loyola, de imponerle a la Cooperativa local el cobro del canon del agua, un servicio que depende del municipio.
En una entrevista con Cadena Tiempo, Currumil se mostró molesto con el municipio local por querer imponer, mediante un proyecto de ordenanza, que continúe siendo el agente de retención del servicio de agua. A través de este proyecto de ordenanza que el Concejo Deliberante intenta sancionar, el municipio de Camarones pretende traspasar el servicio del cobro del canon del agua a la Cooperativa local.
“La Cooperativa Eléctrica ya se dio de baja un convenio anterior, ante reiteradas propuestas para formalizar un acuerdo mejor. El mes pasado enviaron una nota desde la Municipalidad diciendo que la Cooperativa no iba a hacer más el trabajo de agente de retención y hoy lo quieren imponer mediante una ordenanza de forma unilateral, por decisión de Ejecutivo municipal”, se quejó Currumil, que fue tres veces concejal de la localidad y es empleado de la Cooperativa.
“El servicio de agua lo presta la Municipalidad de Camarones. Lo que hace la Cooperativa es realizar el cobro a los vecinos. La recaudación se deposita en una cuenta municipal y a la Cooperativa le queda un mínimo que no sirve para nada”, explicó Currumil.
El trabajador de la prestadora de la servicios localseñaló además que han habido incrementos en el canon del servicio de agua: “Al subir el valor del agua, y como eso va incluido en la boleta con la luz y el servicio de sepelio, la factura aumentó de manera significativa. La gente no lo entendió y la Cooperativa ha comenzado a recaudar menos”.
Ahora, “la Municipalidad quiere obligar a la Cooperativa que sea el agente de retención, sin mediar un acuerdo entre partes”, denunció Currumil.
Por lo pronto, la Cooperativa eléctrica hizo una contrapuesta para seguir cobrando el servicio del agua pero en boletas diferenciadas, solicitando un mayor porcentaje de la recaudación.
