La Asociación de Capitanes de Pesca mantiene permanente motivación para interactuar con los principales actores de la actividad pesquera nacional, y en la mañana del viernes el Secretario General Cap. Jorge Frías recibió en la Sede Central al Subsecretario de Pesca de la Nación, Carlos Liberman, que asistió acompañado por su asesor Dr. Ariel Corsaro, el Director nacional de Acuicultura Guillermo Abdala, y Antonio Macchioli, representante por el Poder Ejecutivo Nacional ante el Consejo Federal Pesquero. Si bien en otra oportunidad el titular de la cartera pesquera estuvo en la sede Ciudad de Buenos Aires del gremio, no se puede soslayar la relevancia de su visita.
Más allá de la camaradería, mientras compartían desayuno fueron diversos los temas abordados, y fundamentalmente se conversó sobre la formación de las tripulaciones de cara al enfoque ecosistémico y el comanejo pesquero; lo que tiene mayor relevancia ante la realidad que presenta la extracción de un recurso natural con artes de pesca de arrastre del Mar Argentino, recurso que en los últimos años brindó altos rindes y en particular la especie langostino, incluyendo también el descarte pesquero y el incorrecto aprovechamiento de lo desembarcado en puertos.
El costo del combustible es una variante que impacta claramente en el negocio, pero lo que efectivamente daña es la falta del recurso pesquero. El poder de pesca de los buques es claramente superior al de antaño, con bodegas más amplias y motores más potentes y se impone debatir si se puede mantener el equilibrio para satisfacer las necesidades en el corto plazo y a su vez llevar adelante una pesca sostenible en el mediano y largo plazo. La intensidad en las capturas naturalmente genera rentabilidad inmediata pero el riesgo puede resultar contraproducente para el futuro inmediato.
Liberman y Frías coincidieron en la voluntad de inversión tanto en nuevos buques como en tecnología por parte del sector empresario, con ejemplos como Valastro Newsan con el B/P “Maria Alejandra 1ro”; el Grupo Moscuzza con los pesqueros “José Américo”, “José Marcelo”, “Graciela I” y “Nina”; la construcción del “Luiggi” que desarrolla SPI para Solimeno; el “Federico C” de Contessi y los buques botados que operan en Puerto Rawson, entre otros. Más allá del largo camino que queda transitar en ese sentido para contar con una pesca más segura para las tripulaciones y más efectiva para toda la cadena laboral, reconocieron que se debe continuar en la búsqueda de herramientas para mejorar el aprovechamiento del recurso que ingresa en las redes y entonces la educación resulta imperiosa, pero no solo las tripulaciones deben tener el conocimiento real de la actividad previo a la extracción, también es tarea del resto de los involucrados: funcionarios, empresarios y demás trabajadores, a colación de lo anunciado en días anteriores por parte del sector empresario acerca del dictado de “capacitaciones destinadas a difundir y afianzar las buenas prácticas tendientes a maximizar la calidad de los recursos a bordo de Buques Pesqueros”.
El tiempo ha demostrado que las soluciones económicas a la problemática del descarte no dieron el resultado esperado, tal la experiencia europea, y que la economía de mercado no puede solucionar lo que depende de la naturaleza y que el humano no respeta. Liberman es conciente de ello, en ese sentido viene realizando una tarea innovadora en el sector atento a que su despacho trabaja de puertas abiertas a todos los actores, pero obviamente sus deseos y coincidencias no son de fácil implementación.
La satisfacción del Secretario General Jorge Frías queda expectante del compromiso de colaboración del Subsecretario de Pesca para que la Asociación cuente con su cefocapemm de manera tal que los capitanes puedan atender sus necesidades en cuanto a capacitación en forma directa y así hacer su aporte para la mejor formación del recurso humano, entendiendo que la falta o incompleta educación es la cuestión de fondo para la eficiencia de la actividad.