Se trata de una iniciativa de la Secretaría de Desarrollo Comunitario. A través los Ce.Ge.Ba Nº 3 y Nº 4 se coordinaron diversos actividades en distintas escuelas de la ciudad
Ayer se llevó a cabo el cierre de los talleres dedicados a la prevención de violencia escolar y abuso infantil. Se trata de una iniciativa de la Secretaría de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Puerto Madryn en articulación con los agentes de los distintos Centros de Gestión Barrial.
Durante varias semanas, los docentes de cada institución, con el apoyo de agentes municipales, trabajaron actividades en el aula con el fin de fortalecer los valores y generar conciencia entre niños y niñas para, luego, mejorar las relaciones entre sus pares. Las propuestas incluyeron dramatizaciones, obras de arte y trabajos audiovisuales.
De este modo, desde el Estado se busca que la escuela sea utilizada como ámbito de convivencia donde se refuerzan esos valores y se trabaja desde la infancia tratando de involucrar a las familias.
Cabe destacar que dichas acciones se realizaron con la colaboración de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia, cuya representante es Lorena Antilef; integrantes de la Policía Comunitaria, CESIA “Dr. Pozzi”, INADI y personal del Centro de Atención Primaria de la Salud (CAPS) Aristarain.
Una experiencia inolvidable
En la Escuela Nº 46, se trabajó sobre la prevención de la violencia en el ámbito escolar o “bullying”. Luego de la experiencia, las docentes resaltaron que, tras los talleres, la convivencia entre los alumnos mejoró notablemente.
Analía Guzman, docente junto a Cinthia Little, trabajó con grupos que transitan el último año de la escuela primaria. Ellas expresaron: “Es algo que vamos a continuar, el resultado fue tan positivo que no podemos perder el entusiasmo que generó entre los chicos”.
Con los chicos NO
Personal del Ce.Ge.Ba. Nº 4 trabajó junto al equipo de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia en el barrio Perón. Allí se realizaron dos encuentros en la Escuela Nº 222 con la idea de reforzar el trabajo en prevención del abuso sexual infantil.
En este caso, se trató de trabajos con alumnos cuarto y quinto grado que vieron videos y, luego, plasmaron en manualidades sus ideas y reflexiones sobre la temática.
A partir de esta primera experiencia se espera que el año siguiente se continúe y se instale con distintas dinámicas de acuerdo a las edades
