Con el apoyo de todos los bloques y la sola abstención del legislador de Cambiemos, Eduardo Conde, la Legislatura del Chubut volvió a declarar la Emergencia en los Servicios Públicos de energía eléctrica, agua potable y cloacas para todo el territorio provincial, además de garantizar la protección de empleo y la relación laboral de los trabajadores.
La Ley, que fuera vetada en diciembre pasado a pesar de haber conseguido el apoyo unánime del pleno de la Legislatura, fue presentada nuevamente por el diputado José María Grazzini, del Partido Justicialista-Frente para la Victoria.
En las instancias previas a la presentación, Grazzini reclamó que el Gobierno Nacional le dé a Chubut un trato similar al que ha brindado a provincias como Mendoza, Santa Fe, Córdoba, Chaco y Buenos Aires -entre otras-, en las que condonó millonarias deudas que mantenían las empresas que distribuyen energía en esos territorios con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico Sociedad Anónima (CAMMESA), con el objeto de normalizar las prestaciones.
“Todos conocemos la realidad del sistema cooperativo de Chubut, con muchas de las cooperativas que le deben a CAMMESA, sin embargo, no vemos a ningún representante del Gobierno Nacional, como sí vimos a Frigerio yendo a juntarse con todas aquellas empresas para condonar sus deudas. Frigerio no vino a nuestra provincia para reunirse con la Federación de Cooperativas para condonar la deuda en Chubut. Tampoco va a venir, porque no les interesa” remarcó el legislador.
“Solamente van donde están los votos de los grandes centros urbanos, cuando lo que debe interesar es a quién se defiende y representa, si a las grandes corporaciones o al pueblo. Ahora se critica cuánto gana el trabajador, no cuánto ganan las empresas. Se impone discutir el salario de los trabajadores, porque es más fácil oprimir al obrero que a las corporaciones”, añadió Grazzini.
“En nuestra provincia el gobierno apunta el destino de los fondos públicos hacia otro lado y no hacia la gente. El año pasado gastó 60 millones de pesos en publicidad, mientras negó recursos para el Transporte Educativo Gratuito (TEG) que costaba solamente 10 millones. El gobierno de Chubut prefiere hacer propaganda y no garantizar que los chicos y docentes lleguen a las escuelas. De eso hablamos cuando nos referimos a la distribución de los dineros públicos. Se gastan 200 millones de pesos en combustible para las localidades del interior, cuando la obra para llevar energía con un interconectado tiene el mismo valor que lo que se adeuda en gasoil”, remarcó en su fundamentación el diputado José Grazzini.