En un conmovedor testimonio compartido por Sandra Otalora, madre de un joven que ha luchado contra la depresión y problemas relacionados con las drogas, se pone de relieve la angustiante situación que enfrentan muchas familias que atraviesan por trastornos mentales juveniles. Sandra compartió su experiencia con un dispositivo de salud mental en el Hospital de Puerto Madryn, describiendo el sufrimiento, agotamiento y dolor que ha vivido junto a su hijo en su largo proceso de tratamiento.
Durante más de un mes y medio, su hijo estuvo internado, un período en el que la familia se vio profundamente afectada por la situación. “Es mucho sufrimiento ver un hijo así”, expresó Sandra, refiriéndose al desgarrador proceso de enfrentar la depresión de un hijo y la impotencia de no saber cómo ayudarlo.
En su testimonio, Sandra destacó la importancia del apoyo de los profesionales de salud mental, quienes, a pesar de estar sobrepasados por la cantidad de pacientes, brindan un apoyo invaluable tanto a los pacientes como a las familias. “El cuerpo médico de salud mental, los enfermeros, hacen un trabajo titánico”, señaló, haciendo especial énfasis en la dedicación y esfuerzo del equipo a pesar de las adversidades.
El relato de Sandra también puso en evidencia una dura realidad: no solo los jóvenes se ven afectados por estos trastornos. La depresión y otros problemas de salud mental afectan a personas de todas las edades, y el sufrimiento es compartido por padres, hermanos y demás seres queridos. “Hemos visto mucho dolor en el medio”, agregó Sandra, mencionando las fechas festivas que pasaron en el hospital, entre Navidad y Año Nuevo, donde pudo observar el sufrimiento de muchas otras familias.
Con 10 años de tratamiento para su hijo, Sandra relató que a pesar de los esfuerzos realizados, su hijo dejó la medicación y volvió a caer en depresión, lo que generó una nueva etapa de angustia en la familia. Sin embargo, con el tiempo, su hijo se encuentra algo más estable.
Sandra expresó también la importancia de la fe y el apoyo mutuo entre padres que enfrentan situaciones similares. “Hay que seguir luchando por la salud mental de los jóvenes”, subrayó, instando a todos a mantener la esperanza, ya que, a pesar de los desafíos, nunca está de más brindar una palabra de aliento a quienes atraviesan estas difíciles circunstancias.