La Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (UNPSJB), sede Puerto Madryn, atraviesa un momento de contrastes. Por un lado, la institución celebra un récord de ingresantes, con más de 1300 nuevos estudiantes que eligieron iniciar sus estudios universitarios en la ciudad. Por el otro, enfrenta serias restricciones presupuestarias, ya que continúa operando con el presupuesto reconducido del año 2022.
Así lo confirmó Gastón Morales, delegado zonal de la universidad, quien explicó que debido a la falta de aprobación de nuevas partidas en 2023 y 2024, deben administrar los mismos recursos con los que contaban hace más de dos años. “Nos estamos ajustando como toda la sociedad, pero con el objetivo firme de mantener la universidad abierta, con estudiantes en las aulas y garantizando su formación profesional”, expresó.
Morales también indicó que el incremento en la matrícula se debe, en parte, a que muchos jóvenes optaron por no migrar a otras provincias para estudiar, y también a que otros que estaban cursando en diferentes puntos del país decidieron regresar a Chubut, solicitando pases y equivalencias para continuar su formación.
A pesar de las dificultades, desde la UNPSJB destacan que se siguen brindando las clases con normalidad y que el compromiso institucional es garantizar la continuidad académica. Además, se mantiene vigente el beneficio del 50% de descuento en la tarifa de energía eléctrica para la universidad, aprobado por el Concejo Deliberante local, lo que representa un alivio en el marco del ajuste presupuestario. Este beneficio estará vigente hasta diciembre de 2027.
Finalmente, Morales advirtió que, por el momento, no hay señales de una posible inyección de fondos adicionales por parte del gobierno nacional, lo que refuerza la necesidad de continuar trabajando con responsabilidad y priorizando el acceso a la educación superior pública en la región.
